En Casas de Madera Bálticas, sabemos que una correcta cimentación es fundamental para que las viviendas mantengan su calidad y durabilidad con el paso del tiempo. Al construir una vivienda, es esencial que sus cimientos sean sólidos, ya que representan la base sobre la que descansará toda la estructura. La estabilidad y la resistencia de las casas prefabricadas dependen directamente de la calidad de su cimentación.
Importancia de la Cimentación en Casas Prefabricadas
Una vez que trasladamos las medidas y los detalles especificados en los planos al terreno, en Casas de Madera Bálticas nos aseguramos de realizar una cimentación exacta, bien calculada y adaptada al tipo de suelo. Esto nos permite evitar futuros problemas de humedad que puedan dañar la estructura de la casa. Si la cimentación no se hace correctamente, la humedad puede filtrarse en la vivienda, lo que eventualmente debilitaría la estructura y reduciría su vida útil.
Para garantizar la impermeabilidad, en Casas de Madera Bálticas utilizamos una membrana de PVC en la base de la cimentación. Esta membrana de alta calidad evita que la humedad del suelo suba por los cimientos, protegiendo la vivienda. La función principal de una cimentación es soportar el peso de la estructura de la casa y anclarla al terreno de forma sólida.
Es importante aclarar que, aunque las casas prefabricadas puedan parecer más ligeras, estas también están firmemente ancladas al suelo, como cualquier casa construida de manera tradicional. A diferencia de lo que algunos clientes piensan, una casa prefabricada no se puede trasladar de lugar una vez que está instalada, ya que su base está profundamente fijada al terreno, proporcionando la estabilidad que una vivienda necesita para soportar el paso del tiempo.
Tipos de Cimentación que Ofrecemos
En Casas de Madera Bálticas, ofrecemos distintos tipos de cimentación para adaptarnos a las necesidades específicas de cada proyecto, considerando factores como el terreno, el clima y el tipo de vivienda.
1. Losa de Hormigón Armado o Zapata Corrida
La opción más común para la cimentación de nuestras casas prefabricadas es mediante una losa de hormigón armado o una zapata corrida de hormigón de hasta 25 cm de grosor. Para mejorar la resistencia, en el espacio entre las zapatas utilizamos un forjado sanitario de hormigón armado con un espesor de 20 cm, que incluye una capa de compresión de 5 cm y un encofrado perdido de polipropileno. Este tipo de cimentación proporciona una base sólida, uniforme y resistente que soportará la estructura de la casa de manera efectiva.
La ventaja de esta técnica es que permite una distribución uniforme del peso de la vivienda, evitando problemas de asentamiento y garantizando que la estructura se mantenga estable y firme durante décadas. Además, esta cimentación previene problemas como la acumulación de humedad en el interior de la casa, mejorando así el confort y la durabilidad.
2. Base de Entramado de Madera
En Casas de Madera Bálticas, también ofrecemos una opción de base con entramado de madera, ideal para nuestras casas de madera. Este tipo de cimiento es firme, confiable y ofrece ventajas específicas cuando el terreno presenta particularidades que requieren una cimentación distinta al hormigón.
El entramado de madera es una solución muy eficaz para evitar la humedad penetrante, ya que crea un espacio entre la casa y el suelo que permite una buena circulación del aire. Además, esta base nivela la superficie sin necesidad de cimientos de hormigón, lo que la hace ideal para terrenos irregulares. Esta estructura también permite la ampliación futura hacia áreas de terraza o zonas de descanso al aire libre, creando un espacio cómodo y versátil.
El uso de una base de entramado de madera es fundamental en terrenos donde una cimentación de hormigón sería complicada o innecesaria. En algunas ocasiones, también puede simplificar el cumplimiento de normativas locales, como en el caso de proyectos para zonas de camping. Esta cimentación, al ser más flexible, permite que la vivienda se adapte mejor a su entorno natural.
3. Base de Pilotes de Hormigón
Otra opción para cimentar nuestras casas de madera o cabañas es mediante pilotes o hileras de bloques de hormigón, una técnica que combina estabilidad y facilidad de instalación. Esta cimentación consiste en colocar hileras de bloques de hormigón sobre los que se asentará la estructura. Entre sus principales ventajas, se encuentran:
- Estabilidad y durabilidad: Los bloques de hormigón brindan una base sólida y resistente que puede soportar el peso de la cabaña a lo largo del tiempo.
- Facilidad de instalación: Instalar bloques de hormigón es más rápido y sencillo que verter una losa de hormigón completa, ahorrando tiempo y esfuerzo.
- Nivelación: Los bloques de hormigón permiten una nivelación precisa, que es clave para la estabilidad de la construcción.
- Evita el contacto directo con el suelo: Al elevar la casa sobre bloques de hormigón, se reduce el riesgo de contacto con el suelo húmedo.
- Acceso a instalaciones: Al dejar un espacio bajo la vivienda, se facilita el acceso a las instalaciones de suministros en caso de mantenimiento.
Sin embargo, este sistema también tiene algunas desventajas:
- Costos: Aunque en muchos casos es más económico que una losa completa, los costos de materiales y mano de obra pueden ser considerables.
- Dificultad de ajuste preciso: Puede ser un poco más difícil lograr un ajuste perfecto en la nivelación en comparación con otros métodos.
- Necesidad de aislamiento adicional: Para proteger contra la humedad y el frío, es recomendable añadir un aislamiento entre los bloques y la base de la cabaña.
Conclusión
En Casas de Madera Bálticas, estamos comprometidos con la calidad de nuestros cimientos, ya sea mediante losas de hormigón, entramados de madera o bloques de hormigón. Cada método tiene sus ventajas y está pensado para ofrecer la máxima garantía de durabilidad y confort. Entendemos que la cimentación es la base de una vivienda duradera, y por eso prestamos especial atención a cada detalle del proceso. Con una buena cimentación, tu casa de madera estará preparada para resistir el paso del tiempo y mantener su solidez estructural.